martes, 25 de diciembre de 2012


¿SE DEBE DAR ARENA A LOS
 
CANARIOS?

            Hay criadores que no proporcionan arena a sus canarios argumentando que están tan sanos como aquellos a los que se les da; en definitiva que no encuentran ninguna diferencia.

            Sin embargo, la realidad biológica es que muchas clases de pájaros salvajes comen arena como parte de su dieta básica; ellos han desarrollado instintivamente esta conducta a lo largo de millones de años, igual que han desarrollado instintivamente su capacidad para hacer el nido, bañarse, buscar y comer semillas, etc.

            Hace casi 200 años que los criadores de diversos países les dan arena a sus canarios en un recipiente a parte o mezclada con los granos, y en las pajareras y voladeras el suelo suele ser de arena o recubierto de ella, donde los pájaros pasan mucho tiempo picoteando.

Si damos agua a los canarios .es, porque la beben, si les damos determinadas semillas es porque por la construcción de su pico son Fringílidos, es decir, comedores de semillas y si les damos arena es porque activamente la buscan en cuanto tienen ocasión.

Los canarios, y otras muchas aves, tienen un órgano digestivo especializado llamado molleja, el cual tiene como misión moler las semillas para poderlas digerir ya que las aves no tienen dientes para poder hacerlo. La molleja está for­mada por unas masas musculares muy fuertes y recubiertas de una tejido muy resistente a la abrasión y emplea la arena para deshacer las semillas y así permitir que los jugos digestivos puedan continuar más fácilmente 'con el proceso digestivo. Toda la molleja está interiormente recubierta de piedrecitas que muelen las semillas como un molino.

Las pequeñas piedrecitas que ingieren los pájaros pronto son pulverizadas por el roce entre ellas y con los granos. Si son minerales solubles, como la piedra caliza, pasan a la sangre y se utilizan por el organismo para la formación de las plumas, huesos, cáscaras de huevo, etc. o como minerales para otras funciones orgánicas. Si son insolubles, como el cuarzo, granito, pasan por el tracto digestivo y se expulsan al exterior cuando con el desgaste se han hecho muy pequeñas.

Una prueba de la necesidad que tienen los canarios de arena, consiste en dejarles sin ella, y sin jibia, durante un mes. En cuanto se les pone arena, o jibia, o se les suel­ta en un voladero con suelo de arena, inmediatamente se ponen a comer arena.

Hoy en día estamos llenos de productos que nos ofrecen las casas comerciales: vitaminas, oligo­elementos, minerales, pastas de la más variada composición, ionizado­res del aire, probióticos y todo lo que uno pueda y no pueda imaginar. Quizá olvidamos que los canarios son aves que han vivido y viven en libertad, y que casi todas las razas actuales han sido creadas en épocas recientes en las que se ha seguido un método consistente en imitar a la naturaleza. Personalmente creo que se debe seguir ese método: granos frescos (con poder germinativo), verdura y fruta, pasta con pan o bizcocho, huevo, granos germinados, jibia, arena a ser posible de playa o caliza y si es posible sol y amplio espacio para volar es todo lo que los canarios necesitan para estar sanos y fuertes. Las casas comerciales darán mil y un argumentos para decir que se deben utilizar tales o cuales productos, ya que ese es su negocio. Llevo 40 años criando canarios y he probado de todo, y estoy volviendo a métodos lo más naturales posibles: son los que me han dado y me dan mejores resultados.
 
Ángel Rodríguez Cardeña


jueves, 20 de diciembre de 2012


¿CUÁNDO UNA HEMBRA ES BUENA?

            Lo primero que debe procurar cualquier criador es tener buenas hembras reproductoras. Pero, ¿cuándo una hembra es buena? Una buena hembra debe poseer las siguientes características:
-       Construye bien el nido.
-       Pone muchos huevos y todos fecundados.
-       Incuba bien.
-       Cría su nidada con esmero y buenos resultados.
Para obtener buenos resultados conviene saber cuales son los procesos que tienen lugar durante este periodo de tiempo. Numerosos son los zoólogos que han estudiado el comportamiento animal durante la reproducción. La hembra del canario es, entre las especies domésticas, una de las que se ha escogido para este estudio. Entre los elementos encontrados se han observado múltiples relaciones. Por ejemplo, se ha constatado que el ambiente condiciona enormemente la puesta a punto del organismo para la reproducción, o dicho de otra manera, que el ambiente acelera o retrasa el comienzo de la reproducción.
Una buena nidada no es más que una sucesión de factores externos que desarrollan otros en el organismo de la hembra. Las hormonas son unas sustancias segregadas por las glándulas que, transportadas por la sangre, influyen en todos los procesos fisiológicos de lo que está vivo. Todo el funcionamiento del aparato reproductor depende de las hormonas.
Durante esta fase, entra en acción la hipófisis, que segrega una sustancia que desencadena la actividad de los ovarios gracias a la acción de unas hormonas llamadas estrógenos. La endocrinología humana ha demostrado que los sentimientos están muy influenciados por las hormonas.
Los estrógenos son los responsables de los cambios de actitud de la hembra: nerviosismo, mariposeo con las alas, transporte de materiales al nido,  tomar la posición de copulación,...
El canto del macho, en este momento, contribuye a acelerar la producción de estrógenos en la hembra, que llama al macho con una piada característica: cui, cui, señal de que desea formar una pareja.
En este momento, para la hembra, comienza el verdadero proceso de la reproducción con la construcción del nido que empieza con los materiales más gruesos. Los criadores no ponen siempre atención, pero es en esta fase en la que las hembras se arrancan las plumas del vientre para poner al descubierto una pequeña superficie llamada placa incubadora, y es gracias a la transmisión de su calor como se asegura la incubación de los huevos.
Esta placa incubadora favorece el contacto y la percepción de otras cosas además de los huevos. Concretamente los materiales del nido, de hecho el frotamiento y contacto con los materiales de construcción más finos da la señal de que el nido está terminado y se provoca la modificación de su producción homonal que la hace detener la construcción del nido.
El contacto con los huevos estimula una nueva producción hormonal que tiene por efecto impulsar a la hembra a incubar.
Este flujo disminuirá a medida que se aproxima la eclosión, momento en que la hembra sufrirá otra estimulación.
La agitación de los jóvenes y los picos constantemente abiertos son los factores que empujan a la hembra a alimentarlos sin abandonar el nido, y así los jóvenes permanecen calientes y se les favorece la digestión.
El flujo hormonal disminuye y permite a la hembra ausentarse del nido por periodos cada vez más largos hasta el abandono definitivo.
Todo este proceso hormonal se detiene aproximadamente al cabo de tres semanas, para volver a empezar de nuevo y construir un nuevo nido. ¿Pero cual puede ser el papel del criador en este mundo maravilloso?
La experiencia aconseja, al menos a los criadores noveles, que dejen desarrollar naturalmente todo este proceso evitando acelerar el ritmo natural.
Todos los estudios sobre la materia han demostrado que la familiarización con el ambiente y la confianza con el criador son los principios para conseguir buenos resultados en la época de cría.
Es indispensable observar el periodo de reposo, sin iluminación ni calefacción artificial, proporcionando una alimentación adaptada a este periodo.
Preparar bien a una hembra significa esperar a que los días sean bastante largos (marzo – abril) y sólo en caso de mal tiempo, ayudar con iluminación o calefacción artificial.
A veces, puede ocurrir que una hembra esté muy debilitada y no sea capaz de alimentar bien a sus polluelos y entonces, los jóvenes muy débiles, ya no la estimulan abriendo el pico lo que provoca la ruptura de la cadena que se ha descrito antes.
La separación de los machos y las hembras no sólo es útil sino que se convierte en indispensable cuando el macho es agresivo con la hembra y los jóvenes, pero es necesario que la hembra pueda seguir viendo o escuchando el canto del macho.
Como se dijo anteriormente, la construcción del nido provoca las estimulaciones hormonales que favorecen el proceso de la incubación. De ahí que el criador debe de proporcionar los materiales para hacer el nido: material grueso y después de fino. Esto debe hacer que la hembra escoja los materiales mejores y más adaptados tal como la naturaleza le ha enseñado. Un hembra puede construir el nido en menos de un día.
Una recomendación para aquellos que crían en el exterior  o en un lugar sin calefacción: desconfiar de las primaveras muy frías, las hembras abandonarán el nido al décimo día de haber nacido los pollos durante periodos de tiempo demasiado largos, dejando a los jóvenes sin estar completamente emplumados con el riesgo de morir de frío si la temperatura es inferior a 10º.  Si esto ocurre no hay que culpar a la hembra de negligente, ella no reacciona a las variaciones de la temperatura exterior sino sólo a sus estímulos hormonales que le dicen que a los 10 días de haber nacido los pollos su ausencia del nido se puede prolongar un cierto tiempo. El criador que conozca esto, debe esperar el mejor momento para comenzar la cría o prever un cierto calentamiento del local que pueda prevenir este inconveniente.
 La selección de un plantel en el que se ha considerado tener buenas reproductoras  ofrece una cierta garantía. Pero atención, la consanguinidad pude llevar a una degeneración del embrión. La hembra puede entonces dudar en alimentar  a los “malos” jóvenes en los primeros días comprometiendo así el resultado de la cría.
Una indicación que podría ser dada para terminar, es alimentar a los pájaros con el sistema más simple y tradicional posible. Las buenas indicaciones pueden ser tomadas observando a los pájaros en libertad.
Las reglas de la naturaleza pueden presentar excepciones, pero atención, una excepción no puede transformarse en regla. Una hembra en malas manos no dará buenos resultados y se correrá el riesgo de perder sus capacidades reproductoras.
¡No hay milagros!
 
Ucceli.
Sacado de la revista “Le bossu Belga” de mayo del 2001.
Traducido por Ángel Rodríguez Cardeña.

sábado, 8 de diciembre de 2012

TALAVERA 2012  
Se ha celebrado del 6 al 9 de diciembre de 2012 una exposición de canaricultura en Talavera de la Reina. La exposición se anuncia como Nacional, pero por desgracia hay varias exposiciones y concursos Nacionales y no hay ninguna verdaderamente nacional que integre a todas. Pero voy a dejar  este espinoso tema que lleva muchos años sin resolverse y me voy a centrar en comentar a grandes rasgos lo que me ha parecido más relevante en los canarios de postura.
Estas grandes exposiciones me han servido para darme cuenta de por dónde iba la canaricultura de postura, en cuanto a calidad y tendencias de determinadas razas. Estas impresiones son tanto más acertadas cuantos más canarios se ven. Mal se puede sacar una impresión aceptable de una determinada raza cuando solo han acudido 8 ó 10 ejemplares de la misma. Con esto quiero decir que lamentablemente cada vez hay menos expositores en estas grandes exposiciones debido a que todas las federaciones y asociaciones las hacen en fechas muy próximas cuando no coincidentes,  con lo que unas a otras se quitan participantes y con ello todas se empobrecen.
Empecemos con los canarios de postura que es lo que ahora nos interesa:
 
Había una buena representación de Rizados de París y Rizados Paduanos. Los ejemplares a simple vista tenían rizos muy voluminosos y mirándolos detenidamente  se comprobaba que así era. Las cabezas tenían muy buenos rizos, también eran muy buenos los rizos del pecho y las aletas.  
 
Mehringer había pocos, pero de calidad. Con ellos se podía uno hacer idea de las características de esta nueva raza que es un Rizado de París en miniatura.

Los Rizados del Norte tenían, en general, las cabezas y los cuellos libres de rizos, así como el abdomen. Esto es un claro avance respecto a años atrás, en los que los rizos invadían el cuello y la cabeza, y en muchos casos el abdomen.  Creo que se está en el buen camino en esta raza. Ya se ha conseguido un canario con unos rizos  que solo están en las partes del cuerpo en que deben estar, sin extenderse más allá de los límites que están fijados.
 
Los Fiorinos siguen los mismos pasos que los Rizados del Norte: cabezas y cuellos limpios. Moñas de un tamaño correcto y bastante bien formadas. La talla se mantiene en unos términos que podemos considerar aceptables. Si fuesen un poquito más pequeños sería mejor, pero tampoco son muy grandes.

La calidad de los Gibosos era muy alta. Casi todos estaban muy bien tipificados en posición y en partes del cuerpo desnudas o emplumadas. Los cuellos muy largos. Me llamó la atención en un grupo de Gibosos de alta calidad que tenían las colas muy estropeadas, con lo que desmerece la impresión que se recibe al verlos. Esto es un fallo del criador en cuanto a una mala  preparación de los canarios para llevarlos a una exposición. En general los españoles preparamos peor a nuestros canarios que la mayoría de aficionados europeos.

Los Melados eran muy buenos, muy típicos y claramente diferentes de los Rizados del Sur y de los Gibosos. Ese es el buen camino para aquellas razas que tienen aspectos similares a los de otras: o son bien diferentes y marcan bien sus características o no valen para nada.

Los  Rizados del Sur eran de gran calidad, con una postura magnífica y con los rizos muy bien definidos y muy ajustados a los lugares prefijados.

Viendo en conjunto todos los rizados de posición se puede decir que hay pájaros de una gran calidad. Que la posición correcta está muy conseguida y que forma parte del patrimonio genético de los planteles y que los rizos se ajustan a los sitios en que deben estar. Cada vez es más raro ver rizados de posición que no la toman, con ausencia de algunos rizos o con rizos extendidos por lugares que no son los adecuados.

Había buen número de Lizard. me llamaron la atención la abundancia de ejemplares con abundantes marcas en el pecho, marcas que no eran muy grandes y que estaban bastante bien alineadas. Las patas casi todas muy negras y las escamas no muy nítidas. El color de fondo aparece sucio en general, lo que es una consecuencia del aumento de melanina en el canario, ya que si tienen patas muy negras y muchas marcas en el mecho, el canario tiene que tener más melanina en todas partes. Parece que se va pasando la moda de los Lizard sin casco que tanto abundaron no hace muchos años, y ya se vuelven a ver mayoría de Lizard con cascos, que cada vez son de más calidad.

Raza Española había mucha y de todo. La mayoría son pájaros pequeños, vivos y ágiles, pero donde se ve todavía mucha variedad es en el cuerpo, que va desde los pajaritos finos hasta otros que son mucho más anchos de hombros y de pecho. Estos pájaros anchos suelen provenir de cruces con verdecillo, cantor de África, etc. y esa es una costumbre que consideraba abandonada desde hace tiempo. Imagino que estos pajaritos de cuerpo anchito no tienen nada que ver con esos cruces.

Llarguet  había pocos y no destacaban en conjunto por su alta calidad. Es una pena pues es una de las razas españolas con más personalidad de los canarios de postura.
Los Yorkshire estaban muy bien. Una buena representación. También muy buena era la representación de los Norwich donde había ejemplares de muy alta calidad. Cabezas, cuerpos y plumajes estaban muy conseguidos. Recuerdo una señora que decía que estos canarios le parecían pollitos, lo cual es una buena comparación.
 
Los Border tenían unos cuerpos muy buenos pero no así los cuellos ni las cabezas. Las cabezas no eran bolas sobre todo cuando se les miraba de frente.
           Los Fifes parecidos a los Border: buenos cuerpos, buena talla y falta de cuello. Las cabezas hay que mejorarlas sobre todo de frente. Algo que me llamó la atención es la posición agachada que tenían y mantenían la mayoría de ejemplares. La posición es muy importante en esta raza y me pareció que estaba muy descuidada.

 
Los Scotch y los Hosso estaban muy conseguidos. Los primeros tenían una magnífica talla por lo grande, los segundos también por lo pequeña. Los cuerpos finos, y la posición muy buena en ambos. Vi varios Scotch que tomaban y mantenían una posición con una curvatura continua, sin brusquedades, casi como dibujada, lo cual es difícil de conseguir. Muchos aficionados consideran que cuanto más pase la cola por debajo del palo mejor y no es verdad; el canario tiene que tomar la posición de una media luna (yo diría de un cuarto y mitad) y las medias lunas no tienen brusquedades ni a la altura de los hombros ni en la cola. Todo el dorso de estas razas debe formar una curva lo más continua posible.
Bueno, y esto es lo que ha dado de sí mi visita a esta exposición. Había de casi todas las razas de postura pero las que no menciono no me han llamado la atención por ninguna característica especial o eran tan pocos los ejemplares que no me parece adecuado hablar de ellos.
Ángel Rodríguez Cardeña

jueves, 6 de diciembre de 2012


LOS PROBIOTICOS


La digestión de los alimentos es un proceso muy importante  para la vida de los pájaros. La digestión se debe realizar lo mejor posible a fin de que el animal pueda aprovechar al máximo las cualidades nutritivas de los alimentos. Numerosos factores pueden influir en el proceso de la digestión. Por ejemplo una situación de stress puede originar un desequilibrio de la flora intestinal y provocar una mala asimilación de los alimentos.

La flora intestinal, que es muy importante, está formada por el conjunto de bacterias, “buenas” y “malas”, presentes en el intestino. El canario gozará de buena salud mientras las bacterias “buenas” sean las que predominen. Si predominan las “malas” el animal estará enfermo. Hasta no hace mucho se pensaba que si el animal estaba enfermo lo mejor era matar las bacterias “malas” empleando los antibióticos. El problema está en que los antibióticos no distinguen entre las  bacterias “buenas” y las “malas”. Entonces se pensó que una buena solución sería introducir bacterias “buenas” después de un tratamiento con antibióticos o sin dicho tratamiento, para así conseguir que las bacterias “buenas fuesen más abundantes”

Desde 1946 los antibióticos utilizados han contribuido mucho a mejorar la salud de nuestros pájaros. Pero desgraciadamente a partir de los años 60 han comenzado a aparecer cepas bacterianas resistentes y, desde hace algunos años, se tiende a reducir la utilización de los antibióticos. Esto ha provocado un interés en dar a los canarios bacterias “buenas” en los alimentos  a fin de conseguir el mismo o similar efecto que con la administración de los antibióticos. Estas bacterias “buenas” son los probióticos. Los probióticos son microorganismos vivos, administrados por vía digestiva y que favorecen la salud del pájaro.

Algunas clases de probióticos están formados por las bacterias presentes en el tubo digestivo de los pájaros, Otras clases de probióticos tienen bacterias que no son las habituales. Algunas clases de probióticos se multiplican en el tubo digestivo de los canarios y otras no. Cuando se suministran estos últimos de una forma continua se produce un tránsito permanente de bacterias  lo que no corresponde a una situación natural, que es lo que se persigue en realidad.

El tubo digestivo de los pájaros contiene una microflora que forma un ecosistema en el que las interacciones microbianas aseguran la estabilidad y contribuyen de este modo a la salud del pájaro. La flora intestinal está compuesta de un conjunto de bacterias favorables (las “buenas”) y otras que pueden no serlo tanto (las “malas”). Si hay un desequilibrio en esta microflora el pájaro estará más indefenso frente a los agentes patógenos e incluso puede llegar a enfermar. La introducción de un probiótico por vía bucal, en el tubo digestivo del pájaro, modificará las interacciones naturales de la microflora. El efecto observado consistirá en un mejor estado de autodefensa  del animal como resultado de la biorregulación de la flora intestinal.

      Sin flora intestinal ningún ser vivo sobreviviría. Juega un papel de barrera contra los gérmenes patógenos destruyéndolos y participa igualmente en la digestión de los alimentos y en el funcionamiento del sistema inmunitario. Pero esta flora intestinal es muy sensible. En efecto, los antibióticos atacan no solamente a los gérmenes patógenos sino también a los beneficiosos con lo que se provoca un desequilibrio en la flora que muchas veces lleva consigo la aparición de diarreas.

Los probióticos actuarán adecuadamente en el tubo digestivo si todas las sustancias que generan alcanzan una concentración suficiente. El sistema digestivo de los pájaros se puede perturbar muy rápidamente. Conviene recordar que un stress puede provocar una reducción de la alimentación sanguínea del intestino y una reducción de la flora intestinal, con lo que se aumenta el riesgo de infección debido a las bacterias nocivas (la causa de la muerte de algunos ejemplares comprados con buena salud y que mueren enseguida en casa del comprador puede ser debida a ésto). Manteniendo en el intestino un buen nivel de bacterias digestivas benéficas, se controlo la proliferación de las bacterias nocivas.   

         En lo que concierne a los pollitos, el probiótico estimulará el desarrollo del sistema digestivo asegurando un crecimiento rápido así como una mayor resistencia a las enfermedades digestivas peligrosas.

         Los probióticos están compuestos habitualmente por  “Streptococcus faecium”, “Saccharomyces cerevisiae,”, “Lactobacillus acidophylus” y “Bacillus subtilis” (esporas), microorganismos todos ellos recomendables para su uso en aves.

         Los efectos de los probióticos son los siguientes:

  • Producen ácido láctico, lo que disminuye el pH intestinal.
  • Actúan como antitóxicos de bacterias entéricas, que son las que producen enteritis.  (Escherichia coli, Salmonellas, etc.)
  • Reducen el stress.
  • Controlan diarreas y problemas digestivos.
  • Restablecen la flora intestinal después de un tratamiento con antibióticos.
  • Facilitan la metabolización y absorción de los nutrientes.

Se deben administrar los probióticos:

  • En los casos de problemas intestinales, vientre rojo, etc.
  • En todos los casos de diarrea.
  • Después de un tratamiento con antibióticos.
  • Antes y después de todas las situaciones de stress como traslados, concursos, exposiciones, etc.

     El probiótico se dará después del tratamiento con antibióticos para reponer la flora intestinal y evitar la aparición de diarreas. Lógicamente no se dará con el antibiótico pues éste mataría todos los gérmenes que aporta el probiótico y este no tendría ningún efecto.

         Los probióticos no poseen contraindicaciones ni efectos colaterales. En caso de sobredosificación, pasando unas 4 veces la dosis indicada, pueden ser perjudiciales.

Por ser un tratamiento natural es recomendable su uso permanente ya que no produce acostumbramiento y no genera resistencia bacteriana.  

Los probióticos se pueden suministrar con la pasta o con el agua de bebida, aunque los  mejores resultados se han obtenido cuando se ha agregado el probiótico a la pasta y no al agua de bebida.

Varios laboratorios comercializan probióticos. Se deben seguir las indicaciones sobre dosis pues la concentración puede variar de unos laboratorios a otros. Como todos los probióticos no están compuestos por las mismas bacterias, es aconsejable que cuando se acabe de dar el probiótico de un determinado laboratorio, cambiar al de otra marca y otra composición.

Todos los trabajos efectuados sobre los probióticos nos han aportado información sobre su funcionamiento, pero todavía queda mucho por descubrir. Solamente un conocimiento preciso del modo de actuación de cada probiótico permitirá mejorar sus efectos. No hay ninguna duda de que en los años futuros seguiremos aprendiendo sobre la mejor utilización de estos productos.